"no hay mal que por bien no venga", he querido aprovechar la coyuntura. Y hoy, que parece que a ratos ando algo más animada, me gustaría hablarte de esta común enfermedad y compartir contigo algunos de los viejos, a la vez que sabios, consejos que podemos poner en práctica para intentar hacerla frente. Quizá ya los conozcas porque no son nuevos, pero... ¿no crees que siempre viene bien recordar esas cositas básicas que nos van a hacer ganar salud? ¡Ah! Por cierto, si echas en falta algún otra sugerencia que tú pongas en práctica y yo no haya mencionado no dudes en dejar tu comentario y compartirlo.
Vamos al grano. Como seguramente habrás podido comprobar en algún momento de tu vida, y si tienes la fortuna de no saberlo seguro que al menos sí que has oído hablar de ello, la gripe es una enfermedad infecciosa, de fácil transmisión, causada por un virus. Se contagia fundamentalmente por vía aérea, pero también puedes infectarte si tocas una superficie que contenga el virus y posteriormente tu nariz o boca. Las personas enfermas son capaces de transmitir la enfermedad desde un día antes del comienzo de los síntomas hasta unos 3-7 días después de haber empezado con ellos y en el caso de los niños pueden ser incluso más. Y los síntomas comienzan de 1 a 4 días después de que el virus entra en el organismo. Suele presentarse de forma epidémica, generalmente en invierno, y su vacunación no suele ser efectiva de un año para otro ya que el virus muta con bastante rapidez.
Los síntomas suelen comenzar de forma brusca y, como puedes ver en la siguiente imagen, son amplios (además de, claro está, molestos y desagradables):
Es muy importante que tengas cuidado y no confundas la gripe con un resfriado. ¡No son lo mismo! La primera, por desgracia, es más agresiva y tiene más posibilidades de complicarse.
Si tienes la suerte de estar leyendo esto por mera curiosidad quiero decirte una cosa... ¡felicidades, que continúes manteniendo esa buena salud y que sigas disfrutando de este ratito de lectura! Pero si estás como yo, que pareces un trapo (bueno, supongo que si estás leyendo es porque ya vamos remontando el vuelo o porque no hemos terminado de caer, que ya sabemos que cuando la gripe está en pleno apogeo no tiene ganas de leer ni el apuntador), el mensaje debe ser otro... ¡vamos a empezar a cuidarnos que no podemos seguir así!
Y en cualquiera de los dos casos, si te ves con gripe en algún momento (bien presente o bien futuro), no te olvides de poner en práctica este listado de consejos que te doy. Seguro que te ayudarán a encontrarte mejor con mayor rapidez.
Buenos consejos para recuperarte antes de una buena gripe:
Visita al médico para que te mande algo de medicación si necesitas bajar la fiebre. Y si optas por automedicarte (como debo reconocer que ha sido mi caso) ¡qué sepas que eso no está bien! ¡Y sobre todo, eso sí, nunca elijas antibióticos para una gripe! Éstos no son para los virus. Yo me he estado tomando paracetamol de 650mg porque no soy muy de pastillas y, como a mi media naranja (que ha sido quien me lo ha pegado) se lo mandaron de 1g, pues quise probar a ver si con menos me servía. Y ha sido que sí.
Descansa todo lo que puedas. Parece una tontería pero es fundamental y no te va a resultar muy difícil porque estarás tan machacado que no te apetecerá moverte de la cama. Eso sí, también te recomiendo que no te tires en ella días enteros sin moverte. Haz un esfuerzo y sal de la cama aunque sea para sentarte un rato en el sofá y luego tumbarte en él. Es poco pero tu circulación quizá lo agradezca.
Bebe abundantes líquidos. Te ayudarán no solamente a mantener tu cuerpo hidratado ante la fiebre sino que encima ayudaras a desprender las mucosidades del pecho. Y probablemente te vendrá bien para tener que salir de la cama aunque sea para ir al WC. ;)
Aunque no tengas hambre dale algo de energía a tu cuerpo. No te digo que hagas como yo que me he comido un plato y medio de potaje teniendo 39º de fiebre pero... un caldo o una crema calentita pueden ser buena opción. Si estás mucho sin comer puede que al final no sepas si el desfallecimiento es de la gripe o de alguna falta de nutrientes. Creo que merece la pena no descuidar este aspecto.
Refuerza la higiene y ventila bien la casa. De esa forma estaremos dando "aire" a los virus ¡anda que se vayan! ¡Qué no los queremos!
Y creo que por el momento eso ha sido lo que yo más he cuidado. ¿Y tú? ¿Qué remedios pones en práctica? ¿Eres de los que se vacunan cada año? ¿Esperas, como yo, a ver qué pasa y cuando tu cuerpo se ve invadido por el virus es cuando le plantas cara? ¿Eres de los que se toman cuarenta tipos de pastillas o prefieres más la botica de la abuela?
¡Cuéntamelo, me encantaría saber qué haces para vencer la gripe!
Fuente: este post proviene de Cosas de MaGo, donde puedes consultar el contenido original.
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